Davinia cuenta que Pippo la peinaba, pero Javier Delgado, su maquillador, iba hasta su casa y ahí la arreglaba. Para una de las precarnavaleras, su vivienda era una locura con sus familiares y la prensa entremedio. Hasta una novia llegó para que el estilista la maquille, porque no confiaba en nadie más. “Entro a mi habitación, y para mi sorpresa ahí estaba la futura esposa en manos de Javier. Me terminaron de pintar y como estábamos sobre la hora salimos de volada. Cuando llegamos a la ‘preca’, buscamos a Javier para que me retoque antes de salir, pero no estaba. Lo habíamos dejado encerrado en mi casa, mientras él acomodaba sus pinturas”, recuerda entre risas.
Carnaval 2012
“El auto 0 km que me regalaron era con caja mecánica y nunca había manejado uno así. tuve que conducirlo sin saber nada para la prensa”
Davinia Fernández
Estuvo hospitalizada un día. Tuvieron que ponerle suero con vitaminas para hidratarla. Durante el Corso, aunque con arcadas, tomaba sueros para poder aguantar.
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