El sábado, la plaza del Estudiante se llenó de comparseros de casacas rosadas y sombreros blancos, que a voz en cuello pedían que las bandas empezaran a ‘tronar’: eran los integrantes de la Crema Camba, que desde hace 22 años organizan el Festival de Bandas.
El evento empezó a las 11:00 y convocó a grandes y chicos, que se apostaron alrededor de la tarima para disfrutar de la presentación de ocho bandas que disputaban entre sí el honor de tener la mejor composición en los ritmos de taquirari, chobena, carnaval, brincao y kaluyo.
Nicolás Menacho, compositor de ‘temones’ como El transnochador, estuvo desde temprano, pues además de ser amante de la música cruceña, fue reconocido por los organizadores. “Me han dado un gran honor al ponerle mi nombre al festival de bandas”, dijo el maestro, que fue crítico con las bandas. “Hubo una chobena que me gustó, pero no todas me han sorprendido”, explicó, mientras veía al ballet Proyección Oriental moverse al ritmo de la banda beniana Takaná.
Los ganadores
Los banderos fueron llegando de a poco al lugar de concentración, ‘uniformadingos’ y listos para armar el buri con temas inéditos. A las 12:47 llegó Roxana del Río y movió aún más los ánimos. “La banda no debe morir jamás”, sentenció la soberana.
Después de tres horas de música, alegría y belleza, el jurado emitió su veredicto: Millenium y Aguilera compartieron el primer lugar en taquirari; mientras que la banda portachueleña 22 de Noviembre, ganó en chobena. Pan de Arroz Jr. brilló por su brincao; Takaná, Millenium y Aguilera se dividieron el primer lugar en la categoría carnaval y en ritmo kaluyo se premió a la banda Kerembas.
Según Bismarck Kreidler, los temas que se escucharon en esa mañana calurosa se recopilarán en un disco, para que los platillos, los tambores y las trompetas no se dejen de escuchar
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