Se ha vuelto famosa y ha madurado, lo reconoce a pesar de que el reinado carnavalero es calificado como una banalidad. Las responsabilidades del título implicaron sacrificios y renuncias, pero también le quedaron alegrías, amigos, muchas enseñanzas y amor. Habla de sus futuros emprendimientos, quiere ser presentadora de noticias, tener un programa de consulta jurídica. Se embarcará en un emprendimiento empresarial y volverá a actuar. También hace declaraciones del corazón.
¿Qué fue lo más difícil de ser reina?
Dormir pocas horas, a mí me encanta pegar pestañas hasta en la hora de la siesta. Por eso ordené mi vida dejando todo por el reinado (dejé de trabajar en la TV, la actuación y el modelaje). Me entregué alma, vida y corazón.
Es un compromiso que implica mucho sacrificio, debés estar siempre sonriente. Además hay gente que inventa cosas. A mí no me afecta, pero en su momento me dolió por mis seres queridos. Viví una situación en la que me sentí traicionada; esclarecí el tema y al final todo salió bien.
¿A qué situación te referís?
Quedó todo aclarado y prefiero no darle más importancia. Debo rescatar que esta experiencia me dio más confianza en mí misma, sumado a las responsabilidades y los compromisos del reinado forjaron mi carácter y aprendí a reclamar lo justo para mí y no admitir que nunca nadie se meta con mi reputación.
Es una actividad que pareciera no implicar ningún sacrificio ¿En qué escenarios te has exigido más, como modelo, como presentadora, como actriz o como reina?
Creo que en todo lo que hago, soy la que más me exijo, sin duda alguna el reinado es algo superior a cualquier otra experiencia, es único en la vida, sentí mucha presión la semana previa a la coronación, ya que por primera vez la reina del Carnaval iba a actuar, bailar y cantar en su coronación. Quería hacerlo perfecto, porque el pueblo se merecía lo mejor y lo logré.
¿Cómo se puede quitar el estigma de que la mujer es un adorno sobre un carro para las fiestas carnestolendas? ¿Qué hiciste para que no te vean así?
Lo de ser reina va más allá del estigma que la gente usa para referirse a las modelos o misses, lo que me parece mal, porque hay chicas que están en concursos de belleza o que son modelos y son profesionales, inteligentes y emprendedoras.
El caso de las reinas, es distinto, porque si bien algunos te quieren y otros tal vez no, se mira con otros ojos a la soberana. Es parte de nuestra cultura y el contacto directo con el pueblo hace a este "cargo" tan especial y único.
¿El reinado deja réditos económicos?
No puedo negar que gracias al reinado subió mi caché y una vez finalizado el Carnaval empezaron a aparecer contratos muy interesantes de empresas prestigiosas.
¿Crees que podría haber Carnaval sin reina?
Me parece que el espíritu del carnaval es su gente (los carnavaleros), pero también creo que la reina es esa ilusión que todos tenemos de ver a una hermosa chica en un carro, llena de brillos y entregándose a su pueblo.
¿La reina del Carnaval apoya causas sociales como campañas de aseo urbano, seguridad, educación o salud?
Es impresionante el grado de importancia que le da la gente a la reina del Carnaval, te ponen en las testeras al lado de las autoridades y te dan un trato preferencial.
El año pasado sufrió mucho el país por las riadas, sobre todo el Beni. Con los Fachas en cada ‘preca’ recaudamos fondos para mandarles ayuda, yo me bajaba del carro con mi latita a pedir donaciones junto con las damas Fachas. Llegamos a recaudar casi 10 mil dólares, los cuales fueron entregados a la Alcaldía Municipal de Santa Cruz. Pedí a los Fachas que las entradas a mi coronación sean donaciones de vituallas para los damnificados de las riadas, en esa ocasión entregamos a la Gobernación aproximadamente 6 toneladas de ayuda. También junto al Sedes estuvimos en campaña para la prevención del VIH.
Son intensas las actividades de una reina ¿Cómo te preparaste para enfrentar ese reto?
El 2012 fui reina de la agrupación Mita Hori y los Bohemios hacían campaña para ser coronadores el 2013, los acompañé en todo y casi seguí los pasos de la reina del carnaval Davinia Fernández y vi su experiencia de cerca.
Cuando me tocó, alisté un arsenal de vitaminas para estar reforzada, comía doble e iba al gimnasio para tonificar mis músculos. Los Fachas se desvivieron para que la experiencia sea inolvidable y mi chaperón aún más.
Cuando ‘Mamen’ me dijo de sus intenciones conmigo, yo sabía que si aceptaba era para algo serio. Empezamos una relación muy bonita, el Carnaval hizo que todo fuera mágico. Nos arreglamos en octubre de 2013. Es una relación estable, él ha tenido que acostumbrarse a tener corteja porque llevaba más de cinco años que no se arreglaba y de pronto llegó una choquinga que lo tiene de una oreja de aquí para allá, pero nos hemos adaptado muy bien.
¿Los rumores dicen que habrá boda?
La gente dice que hay boda, pero no hay anillo. Yo pasé por una relación muy triste antes de arreglarme con Mamen, con mi anterior pareja estuve comprometida y lamentablemente descubrí cosas que me dolieron mucho y me obligaron a cortar la relación porque me lastimaron. Con Mamen encontré una lucecita en el momento preciso.
De pronto Dios tenía unos planes tan maravillosos y es como si me hubiera dicho: “Hijita dejá de llorar, no ves al ‘churro’ que te estoy poniendo al frente”. Me costó mucho entender el propósito de Dios en mi vida, y más adelante vamos a descubrir si el propósito del Padre es que yo me quede con ese chico.
¿Cuándo volviste a la TV?
Recién volví hace tres meses. Estoy en Ciudad Activa y el carnavalero Fiesta Grande. Me gustaría en algún momento realizar las dos cosas que soy a la vez, abogada y presentadora de TV, sobre todo por ayudar a la gente que no cuenta con recursos económicos para consultar a un abogado.
Ahora estoy esperando que pase el show de las magníficas a fines de febrero y viajaré a Estados Unidos a cerrar el trato para traer una representación de una marca para Bolivia de unos productos de Medio Oriente para mujeres. Quiero invertir bien mi dinero para asegurar mi futuro.
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