Las damas del Círculo de la Amistad, que nombran a la soberana cada año, no lo pensaron dos veces cuando supieron que está de vuelta en Santa Cruz, después de cuatro décadas lejos del terruño.
‘Chingui’ emigró a los Estados Unidos muy joven donde vivió 40 años y hace cuatro que volvió a esta su tierra donde está dedicada a la ganadería junto a su pareja, Piper Becker y han fijado su residencia en San Javier. Es madre de dos hijos, Tania y Keny, y espera con ansias que le den nietos.
Ella siempre vivió en la calle Ballivián, esquina Cobija, lugar rodeado de negocios donde se venden y alquilan trajes de fantasía, en especial para Carnaval, aunque en sus días era otro el paisaje: “Yo no soy de este tiempo en el que mi calle está llena de chaquiras y lentejuelas. En mi época había palitos, aserrín y viruta, porque mi familia tenía carpintería”, dijo al agregar con orgullo: “Soy hija de Tomás Callaú, al que Pedro Rivero siempre le decía ‘sábado sin falta’, aunque hasta la fecha no sé por qué”.
Y aquí es bueno hacer una pausa, para explicar que la guapa dama desconoce que esa expresión se la decían muchos y estaba cargada de picardía, pues el hábil e inspirado ebanista siempre prometía “este sábado sin falta te entrego el trabajo”.
Y a propósito de Pedro Rivero Mercado, ‘Chingui’ le dedica su reinado: “Se lo dedico porque cuando era niña era lo máximo verlo arreglarse para saltar con los Cunumis y salir por las calles, echar agua a la gente, escuchar la tamborita y la banda, esos taquiraris y chobenas que hacían suspirar a las mujeres”, recordó.
Es bueno destacar que nuestra simpática reina del Carnaval de Antaño es hermana del famoso escultor Marcelo Callaú (+), que creció también entre la viruta y el aserrín y convirtió a la madera en arte, ese arte que le dio más prestigio al apellido familiar, pues después de Marcelo, hermanos y sobrinos supieron explotar igualmente su vena artística.
Con semejantes antecedentes ‘Chingui’ se alista para disfrutar de su reinado en el que promete bailar mucho. “Me encanta nuestra música, cuando voy a la plaza principal y escucho que tocan chobenas me pongo a bailar solita. Las personas pensarán que estoy loca, pero lo que pasa es que quienes hemos estado mucho tiempo alejadas de nuestras raíces queremos recuperar el tiempo perdido”.
Y para traer al presente lo mejor de los tiempos de antes es que Miriam Ruth Callaú está preparada para ponerse tipoy, tocado de plumas y zapatos de taco.
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